La readaptación deportiva, también conocida como readaptación de lesiones, consiste en el proceso por el que pasan todos aquellos deportistas o personas que practican algún deporte, después de haber sufrido una lesión. Se considera el tiempo comprendido entre que un paciente sufre una lesión hasta que puede realizar de nuevo la práctica deportiva con normalidad.
La disciplina de la readaptación deportiva o de lesiones une las técnicas deportivas, la preparación física y la fisioterapia. Esto permite que el paciente se pueda recuperar con mayor facilidad de una lesión y que su cuerpo esté físicamente preparado para volver a poner en práctica el deporte.
Este proceso es fundamental para que los deportistas puedan volver a recuperar su forma física y estén de nuevo preparados para la puesta en marcha. Además, la aplicación de la readaptación deportiva es también muy beneficioso para los pacientes. Ayuda a preparar la musculatura, haciendo que se fortalezca y se recupere más rápidamente de la lesión. A su vez, previene a nuestro organismo del sufrimiento de futuras lesiones o recaídas en la misma y evita en gran medida que se vuelvan a dar.
¿Cómo se aplica la readaptación deportiva en fisioterapia?
La fisioterapia es uno de los pilares fundamentales para llevar a cabo la readaptación de lesiones en pacientes, ayudándoles a la vuelta de la práctica deportiva. La duración del proceso y las técnicas aplicadas dependerán del tipo de lesión, del grado en el que se encuentre y de cómo vaya reaccionando el paciente a los diferentes estímulos.
Es importante, llegados a este punto, tener en cuenta que cada cuerpo actuará de manera diferente y que no existen unos patrones de tiempo establecidos para la recuperación. Cada persona seguirá un proceso y lo más importante es escuchar al cuerpo, e ir avanzando según vayan transcurriendo las diferentes sesiones de fisioterapia a las que se someta el paciente.
Generalmente, durante el proceso de readaptación deportiva se distinguen tres fases:
Movilización activa
Dentro de la movilización activa se comprenden los ejercicios de la primera etapa de la readaptación deportiva y de lesiones. Dentro de esta primera etapa o fase de la recuperación, se incluyen los ejercicios de la cadena cinética cerrada (CCC). Esta práctica se define porque la parte distal y proximal del cuerpo están fijas, mientras el resto se desplaza o se mueve con la actividad.
El principal objetivo de esta primera fase es el de conseguir activar la movilidad de la zona, consiguiendo así mejorar la respuesta mecánica del propio organismo a los diferentes estímulos que generan los movimientos.
Recuperación de la actividad deportiva
Durante esta segunda etapa de la readaptación deportiva, el paciente va a comenzar poco a poco la puesta en marcha de nuevo del organismo. Se ponen en práctica ejercicios de cadena cinética abierta (CCA). Esto indica que, aunque el cuerpo sigue permaneciendo fijo, las extremidades ya comienzan a moverse y a trabajar con ellas. Especialmente, se dedica esta fase de la readaptación a movilizar aquellas extremidades que están relacionadas con la práctica deportiva del paciente y sus movimientos.
Entrenamiento deportivo
Es la tercera y última parte del proceso de readaptación deportiva. Durante esta etapa, se comenzarán a centrar los ejercicios de recuperación en la práctica deportiva o el deporte que el paciente está llevando a cabo. Se pueden diseñar circuitos de ejercicios adaptados. Se comienza con los entrenamientos básicos y se va avanzando de manera gradual, según el cuerpo va respondiendo a los diferentes estímulos.
¿Qué beneficios aporta la readaptación deportiva al organismo?
Entre los beneficios principales a destacar de la readaptación deportiva, se encuentran los siguientes:
- Acelera el tiempo de recuperación necesario tras sufrir una lesión: Después de sufrir una lesión, es complicado perder de nuevo el miedo a la práctica deportiva. Esto sucede porque transcurre mucho tiempo desde que se sufre la lesión hasta que se vuelve a la práctica deportiva. Con la puesta en práctica de la readaptación deportiva, se reduce el tiempo de recuperación y el paciente se siente más confiado, puesto que ha ido dando pequeños pasos en la preparación del organismo para la nueva puesta en marcha.
- Mejora la articulación de las extremidades: Además de ayudar a una más pronta recuperación del organismo, prepara las extremidades y refuerza el sistema, lo que hace que la musculatura y extremidades estén más preparadas para evitar el sufrimiento de futuras lesiones.
- Combina la fisioterapia con la rehabilitación: Otro de los beneficios que aporta la readaptación de lesiones es que combina la rehabilitación con la fisioterapia, lo que hace más efectivo la recuperación del organismo.
La readaptación deportiva es una disciplina fundamental en el proceso de recuperación de la musculatura y articulaciones después de sufrir una lesión. Por eso, en Clínica de Fisioterapia Iglesias estamos especializados en este procedimiento. Si quieres conocer más información sobre ello, no dudes en contactarnos.